Hombres buenos, mujeres malas
En pocas cinematografías del mundo se hacen películas con la hondura y complejidad que presenta este cineasta de Taiwan que ya ha alcanzado la estatura de maestro moderno: Hou Hsiao-hsien (pronúnciese Jusiasien o simplemente HHH). Es todo un lujo para nuestro veterano cineclub bilbaíno poder visionar en la pantalla grande este film reposado y reflexivo que exige del espectador una postura mental al mismo tiempo serena y activa. Para aquellas mentes perezosas que denuestan los planos secuencias largos y majestuosos, así como la fluida serenidad del tiempo (“¡Pero qué lenta es esta película!”), les aconsejamos que se olviden un poco de sus prejuicios cinematográficos y que se permitan la libertad –o al menos la curiosidad– de conocer otras miradas y otros parajes.
Hombres buenos, mujeres buenas compone, junto a El maestro de ceremonias y La ciudad de los dolores, una especie de trilogía épica de Hou Hsiao-hsien dedicada al nacimiento de Taiwan como nación. La profusa historia de este film se desarrolla en tres periodos diferentes. En el tiempo presente, la protagonista Liang Ching, una inquieta y depresiva actriz, comienza a recibir por fax las páginas robadas de su diario íntimo que le envía un personaje anónimo. Estos recuerdos escritos la llevan a los años 80 cuando ella, adicta a las drogas, trabajaba en un bar y mantuvo una breve relación con un gangster. Éste fue asesinado y ella aceptó y continúa aceptando dinero de sus asesinos. El tercer tiempo de la historia se refiere al periodo de la caza de brujas que siguió a la llegada al poder de los nacionalistas en Taiwán (la liberación de Taiwán se produjo al final de los años 40, tras 48 años de sometimiento bajo el yugo japonés). Este tiempo histórico viene motivado o recreado gracias a los ensayos de una película en que Liang interpreta a una mujer activista de izquierda, Chiang Bi-yu y cuyo marido, Chung Hao-Tung, fue ejecutado por el terror anticomunista a principios de los años 50 (a estas víctimas está dedicado el film de HHH).
Estos tres tiempos de la historia se revelan poco a poco permeables, tejiendo una densa tela de araña en donde el pasado reciente (los turbios años 80) y el histórico recreado (desdoblamiento e identificación con Chiang Bi-yu) contaminan el presente de Liang que lucha por salir a flote de sus fantasmas personales y de la memoria histórica de su país.
Miguel A. Lomillos.
SESIÓN 1649 - 02/05/2000
Haonan, haonun · Taiwán · 1995 · 108 min
Dir.: Hou Hsiao-hsien · G.: Chu Tienwen, según la obra de Chiang Bi-yu y Lan Bo-chow · Fot.: Chen Hwai-en · Son.: Tu Du-che · Montaje: Liao Ching-song · Act.: Annie Shizuka Inoh, Lim Giong,Jack Kao, Vicky Wei